5ªPARTE CUANDO LA CIUDAD TE ABRAZA

Después de un sueño reparador, me apetecía conocer más la ciudad.
Me puse cómoda, pinta de turista para no desentonar... cogí los nombre de los lugares que tendría que frecuentar los días siguientes, así que pasee sin rumbo fijo pero sin perderme.

Ubicada en las direcciones adecuadas, me fui al paseo marítimo, donde me zambullí en la muchedumbre de la tercera edad o viajeros del IMSERSO mezclados con extranjeros del este... una curiosa mezcla de bermudas de coronel tapioca y cholas de 24 horas con vestidos de gasa semitransparente con dorados y lentejuelas.

Una fauna muy interesante de estudiar.

Haciendo algunos kilómetros por el paseo marítimo y cenando en una tasca de las callejuelas interiores, donde pedir dos bebidas una persona sola, les parece raro.

Unos novios que te piden una foto, un camarero que echa un piropo y un policía municipal que intercepta a un vendedor ambulante que intenta venderte algunos artículos que vete tu a saber cual es su procedencia; son algunas de las situaciones que me sucedieron en una tranquilo paseo en el atardecer de Torrevieja.

Reto 12/365